Volver a los sitios en los que estuve contigo, escuchar nuestras canciones, oler tu perfume...cualquiera de las cosas que me recuerdan a ti. Pienso que me siento así no por quien eres, sino más bien por lo que significaste en mi vida. A raíz de conocerte todo cambió, y aún hoy sigo sin saber si lo hizo a mejor o a peor.
Me siento más madura, con algunas cosas más claras; pero también más vieja, con más decepciones y pesos a la espalda. Tal vez me engaño a mi misma al intentar seguir como si nada, indiferente: una mujer de hierro. Pero no puedo. Cuesta demasiado, duele demasiado.
Hoy no me apeteces. No quiero volver a verte y punto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Manchas de tinta